28.7.06

Invocando al Amor Perdido



Te busco en los escombros de esta gastada ciudad, donde mis huesos invernales te dejaron una vez. Pero no encuentro tu risa; como lluvia sensual que me baña a diario, que matizaba mi piel de bellos aromas, que me llenaba de ti.

¿Dónde busco tu aroma abismal? que me penetraba al alma, que me embruja, que me adormece, que me deja aletargada en el tiempo cuando estaba contigo.

¿Dónde amor? ¿Dónde?...

Dame una señal para encontrarte en los escombros, entre estas calles frías, desoladas. Mira que el tiempo pasa y nos secamos. Que me vuelvo fruta inservible. Lanza emanaciones pudorosas. Haz una fogata con tu piel, que tu aroma abismal me llegue, que me asalte tu perfume en una tarde veraniega.

Haz algo amor, muévete, da señales. Lanza sortilegios, que sé yo. Pero haz algo, que me seco, que toda yo me deshojo en el tiempo ceniciento que nos aborda, que me separa de ti.

¡Muévete, haz algo! Que la ciudad perdida que soy yo, ansia un peatón que pueda andar por sus calles, todas la tardes, hasta caer la noche.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

En tus escritos veo reflejados mis sentimientos , lamentablemente yo jamas podria expresalos como lo haces tu.

René Rojas dijo...

Muy bien Lidia, muy bien, no te preocupes por las influencias, no veo a Sabines por ningún lado.

Debret Viana dijo...

y bueno: lo que no hay es regreso, lo que sobra en la ruines calles de la vigilia, es desencuentro.

EL MATUTE dijo...

Hermosura, deberas, un deleite para los ojos y mente tu blog. Me encanto. El que titulas sin remitente, utsss, me cayo como anillo al dedo en estos momentos. Que tengas un excelente inicio de semana.